
Cualquier cosa puede ser interesante, eso depende de cada uno. Y en un acto de humildad en el que apenas me reconozco, bajaré un escalón más, y adoptaré todo aquello que me suene interesante, para moldearlo con mi intelecto, transmitirlo con mis dedos en pleno tecleteo, donde un sonido maquinal se transforma en fenomenal, y ahí es donde lo interesante empieza a sonar, y la música de la comunicación fluye y se expande, generando un baile vital del que todos formamos parte.
sábado, 5 de abril de 2025
Imagino felicidad
Pero no me la estoy inventando. La ilusión, la creación de mi imaginación, el instante espléndido del acto creativo cuando surge de mí, la ficción que se hace realidad, las líneas que aparecen de la nada y forman un párrafo, tus besos que llegan a mí a ráfagas y los míos que llueven sobre ti cuando yaces desnudo en la cama, cuando sientes el agua en la ducha, cuando el mar te impregna de sal tu hermosa piel aterciopelada. Imagino felicidad paseando contigo de la mano, sonriendo entre miradas furtivas, abrazados contemplando la nada. Y todo lo que imagino forma mi destino. Mi corazón, henchido de pequeñas alegrías amorosas, sale disparado a tu encuentro. Verte feliz me pone contento. Tu sonrisa me desnuda y me reconforta y me viste de dicha, nuestras pieles se rozan y salen chispas, arde el amor y te doy besos de frescor. Imagino felicidad cuando te pienso y puedo sentirte en esos momentos. Jamás creí que pudiera surgir el amor sin tocar, pero imaginé felicidad y se me ofreció el tacto a distancia a través de las palabras, y mi lengua dibuja en tus pezones la sonrisa de placer que ilumina tu cara mientras mis labios van plantando besos en todos tus poros como si fueras el campo de mis tesoros, y lo eres. Dejo unos besos en tu ombligo y les doy calor con mis dedos. Riego de abrazos tu cuerpo y colecciono tus gemidos para adornar mis recuerdos. Imagino felicidad cuando te miro y te pienso, cuando te siento y te beso, cuando todo lo que imagino ocurre dentro de mi cerebro. Y sé que tú puedes sentirlo, pues estas pequeñas alegrías imaginadas son nuestra realidad diaria.
viernes, 4 de abril de 2025
Somos la herida
En la naturaleza lo que más sangra son nuestras vidas. Somos la herida, la brecha, la enfermedad y la salud, el error y, a veces, la solución. La herida de amor que sana con amor. El arte de encontrarte en todas y en ninguna parte. ¿Y cómo es eso? El absurdo de la vida es estar buscando siempre fuera lo que tenemos en nuestro interior. Soy la herida que sangra por tenerte y llora cuando te tiene. Pero el amor me dice que siempre has estado conmigo, que la contradicción que vivo la alimenta mi ego, que deje de mirarme al ombligo. Y en esta isla que vivo que es a la vez la herida que soy puedo sentir el calor de tu amor como emerge desde mi interior. Y cuando dos heridas se juntan, se lamen a raudales, se sanan con besos y cariño y disfrutan como niños. En el juego del amor ganamos todos y la herida, se cierre o no, pasa a un segundo plano, pues vamos juntos de la mano disfrutando de nuestra compañía, absorbiendo en momentos de silencio, con diálogos de miradas, la profundidad del instante, y bailamos como dos gigantes, desnudos y abrazados, protegidos por el amor que nos damos. Somos la herida pero también la alegría. Y somos amor todos y cada uno de los días.
miércoles, 2 de abril de 2025
Pensamiento atrapado
Creemos dominar nuestros pensamientos pero, en mi caso, no es así. Son seres, si es que se puede denominarlos así, o entes libres. Más bien díría que son los pensamientos los que me tienen a mí y no yo a ellos. A veces se me ocurren ideas geniales que, si no las escribo, acaban perdiéndose, aunque creo que se esconden dentro de mi cabeza, siguen ahí, esperando, agazapadas, al acecho del momento idóneo. Libero mis pensamientos atrapados escribiéndolos. Al escribir deshago la red mental que los contiene y se abre una puerta al infinito, es como un parto, el pensamiento cobra vida. Y voy guardando los escritos, son mis niños. Con el tiempo los veré crecer o, tal vez, esos pensamientos atrapados que se liberaron, se queden en meros párrafos que no van a ninguna parte. Se me ocurre comparar a los pensamientos atrapados con el amor. Los pensamientos que libero al escribir y crecen son los amores que fructifican. Lleno las palabras de amor y amo en distancias cortas y largas, abrazando físicamente o solo con palabras, pero con la misma intensidad. De la misma forma que libero pensamientos atrapados, doy al amor alas para que surque mares y cielos y llegue a mis amigos que aún no puedo tocar con mis dedos. Pero los acaricio con el alma, deposito mis besos en la brisa que rozará sus bocas, me cuelo entre sus sábanas, entre sus ropas, entre los pliegues de su desnudez, en pechos y entrepiernas, voy dejando la firma de mis labios en pezones a diario, dejo el aroma de mi amor incubándose en poros y pelos, y cuando se despiertan mis amigos, sienten mis palabras actuando en sus cuerpos. Escribo para liberar al pensamiento y brota el amor entre líneas, espacios en blanco vuelan con el viento y se aposentan en pieles queridas curando todas las heridas y dando alegrías a seres que amo todos los días, cerca y en la lejanía.
martes, 1 de abril de 2025
¿Y si la vida...
... fuera solo enamorar? Pensad en las abejas, de flor en flor, haciendo sus cosas. Y nosotros, enamorándonos aquí y allá, de diferentes personas, de los amigos más encantadores, de cosas, de actividades, enamorándonos de las pequeñas cosas de la vida, una tras otra. ¿Puede haber algo más maravilloso? Nos salimos del sistema y nos enamoramos de otro, completamente nuevo. Ya no competimos, ahora cooperamos. Sonreímos y damos caricias y, cuando descansamos, nos besamos. Hacemos un mundo nuevo repleto de enamoramientos. Me enamoro de tu sonrisa, de tus cejas arqueadas, de tus muecas, de tu ombligo, qué maravilla de ombligo. Me enamoro en un abrazo y de tu lengua. Me enamoran tus silencios, tus miradas y todas tus tontadas. Me enamora como cantas, como bailas, ese ligero contoneo de caderas al afrontar la vida, el camino, el paseo. Me enamoran los pensamientos que habitas y los que suscitas. Me enamora el hecho de imaginarte, es como sentirte cerca, como la música, com el arte. ¿Y si la vida fuera un enorme beso gigante? Un contacto continuo, un abrazo calmante, una dicha perpetua el tenerte siempre delante: sonriendo, oliéndote, nuestros cuerpos entrelazados, nuestras almas bailando agarradas y el horizonte cantando. Y si la vida me enamora es desde que el mundo te me puso delante. Conocerte, sentirte, amarte, qué elegante.
lunes, 31 de marzo de 2025
El universo, la nada y los imbéciles
El universo es un sistema cerrado. O eso dicen por ahí. No se puede desaparecer porque adónde iríamos. Somos energía y la energía se transforma. Un día u otro acabarás adquiriendo la misma forma que tienes ahora solo que entonces estarás más desubicado si cabe. Por otro lado, la nada está llena de cosas y lo que más abunda son imbéciles. Las religiones suelen decirte que si te portas bien irás al paraíso. ¿Pero qué es el bien, dónde está el paraíso y, a estas alturas, quién se cree lo que digan las religiones? La energía no entiende de inteligencia, por eso los imbéciles retornan con tanta frecuencia, los derechos deben lucharse una y otra vez, y los horrores y estragos de la historia vuelven, casi diría yo, de una manera cíclica. Hay tal cantidad de imbéciles, y vuelven siempre con tanta fuerza, que por eso tenemos guerras, genocidios, cambio climático y el sursuncorda. Solo el amor puede salvarnos, a nosotros, claro, no a los imbéciles. Pero el universo es muy grande y la nada podría adoptarlos a todos. Tal vez halla ocurrido así, por eso nadie quiere saber nada del asunto. Del asunto de los imbéciles.
domingo, 30 de marzo de 2025
Enfermedad privada
No se trata de una enfermedad rara, sólo es una hecha a mi medida. Uno de los síntomas es escribir y disfrutar con ello, reír solo, y también bailar y hablar. Cuando no puedo escribir, estoy en blanco, tengo deseo de hacerlo pero algo me lo impide -puede que yo mismo-, sufro hasta lo indecible. No escribo para que me lean, es como otra forma de respirar, escribo para percibir mi existencia, para conocerla y también para amar. Conozco el poder de las palabras, pero aún me cuesta manejarlas. Otro de los síntomas es el amor. Amo muchas veces sin que nadie lo sepa. Amo a personas que nunca lo sabrán. También amo a personas que no me corresponden, pero no me importa. Otro síntoma es el constante intento de entender las cosas, los actos de los demás, la vida en general, cuando, la mayoría de veces, es todo absurdo y no tiene sentido. Nosotros fabricamos el sentido de las cosas. Mi enfermedad privada me lleva a descubrirme en el otro, a ser el gran observador que quiere comprender y escribirlo, explicárselo, gozar con lo vivido, lo sentido, lo amado. A veces pienso que soy contradictorio, pero se me pasa al descubrir que soy multitud. Mi enfermedad me lleva a alegrarme de las alegrías ajenas más que con las propias, pero también a sentir el dolor del otro, el desgarro que intento solucionar pero me veo impotente porque mi enfermedad privada me impide salir de mi cuerpo y amar con el viento. Pero lo intento, siempre lo intento.
sábado, 29 de marzo de 2025
Me asombra
La facilidad con que nos desposeemos de lo importante. Las ganas de complicarlo todo que tiene todo el mundo casi siempre. La de veces que no pensamos, actuamos o hablamos con amor. Me asombra que hasta mi sombra lo sepa y a mí se me olvide muchas veces. Que la vida enseñe tarde lo que debiste de saber siempre. Que la gente diga te quiero sin que sea cierto. Que el capitalismo siga vivo y muchos amigos muertos. Me asombra que el presidente siga mintiendo, que lo gente lo sepa y que sigan votándole. Me asombra que el sexo inventado sea más importante que el amor dado. Que tenga que seguir trabajando, con dolores y sin ganas, por cuatro miseras perras de nada. Me asombra ver en las caras sonrisas falsas, drogas en vena, Palestina hecha cenizas y, en los telediarios, a los magnates muertos de risa. Me asombra que tu sonrisa sea el motor de mi vida, que tu amor me dé alegría, me asombra querer tanto sin haberte visto en la vida. Pero no puedo evitar sorpenderme, asombrarme, alegrarme, sentir amor por las pequeñas cosas que la vida va deslizándome. Me asombra tener confianza aunque siempre me engañen. Me asombra cometer errores, los mismos siempre, no hay quien me iguale. Pero amar amo mejor nadie.
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