viernes, 6 de abril de 2012

Entre dudas

Andaba yo camuflado entre que sí que no que voy que vengo, mejor quieto, ¿y se me muevo?; decídete, me aconsejaron, y decidí nadar en un mar de dudas. Sí, decidí dudar, y hacer así de mi gran compañera de vida, la duda, la mayor decisión, la más original, la que nunca nadie tomó. Y ahora pienso que la luz es una oscuridad que ciega; y lo oscuro, un cúmulo de luz infinito. Y así ahora lo blanco es negro y lo negro blanco, y donde había diferencia, mi decisión que duda lo iguala. Es una gran ventaja que difumina los ismos como racismo y sexismo, mi duda decide que sólo hay personas. Y cuando incluyo animales, mi duda decide que todo son seres. Por eso ahora, yo, como todos, soy un ser que duda, un animal que rumia, un perro negro que piensa, una mujer barbuda. Y la realidad fantástica ya no me abruma, me acuna. Dudo que ser, aunque soy un ser que duda. En el titubeo mi elección pulula. Y he decidido amar la duda, que me camufla, que me absorbe, que me ayuda, que me transporta en volandas por las nubes de vida, salpicando de amor mi decisión que es una: la duda.

No hay comentarios: