domingo, 18 de noviembre de 2012

Un rato

Hace un rato que estoy pensando qué voy a hacer. Cuarenta y seis años; un rato, un ratito, como diría no sé quién. Todavía no he decidido qué voy a hacer con mi vida, ni siquiera he pensado de qué voy a hablar cuando escriba. De todas formas sólo llevo un rato pensándolo: cuarenta y seis años. No me gusta lanzarme a la piscina enseguida, soy de los que meditan las cosas durante el tiempo justo: un rato. Y, como todo en la vida, es relativo. ¿Cuánto dura un momento? ¿Y un momentito? ¿Qué medida tiene un rato? Es cuestión de gustos, sin duda, de gusto por lo flexible. Un momento es algo elástico, se estira en el tiempo, crece, tiene familia, pequeños momentos que van al colegio. Parece una tontería pero ahora me acuerdo de los míos; qué tiempos aquellos, o qué momentos, o momentitos pues todos éramos pequeños. Y desde entonces estoy pensando qué voy a hacer. Los profesores no me aclararon nada, ni los estudios tampoco, al contrario, me generaron dudas, me hicieron pensar, porque si la vida son cuatro días, yo llevo un rato pensando. Cuarenta y seis años. Y aún no sé de qué voy a hablar cuando escriba.

2 comentarios:

Elena Pasima dijo...

En fin, bref: ahorita... Oblomov?

neomaño7 dijo...

Sí, lo tengo. Oblómov de Iván Goncharov pero tengo que leerlo. Yo diría que me parezco más a Ignatius J. Reilly, de 'La conjura de los necios'. Eres la primera persona que conozco que ha oído hablar de Oblómov. Siento no haber visto el comentario antes. Un abrazo Elena.