lunes, 30 de marzo de 2015

Descubrí

Que mi felicidad está en tu mirada y habla a través de tus sonrisas. Que tu rostro alegre me anima. Descubrí que tu felicidad provoca mis rimas, que mi sueño es cuando tu a mí te arrimas, que te imagino en mis brazos y también en mi regazo. Descubrí que pensar en ti me hace más humano. Y que si el verdadero amor no tiene condiciones, a mí, para amarte, no me hacen falta razones. Descubrí que la distancia no me impide quererte y que el amor une incluso más allá de la muerte. Que la vida tiene sus más y sus menos, y tú sin duda eres más, y yo sin ti soy menos. Descubrí como acariciar con la mente, como besar con el corazón, y como el amor puede llegar en las palabras que tu me hablas, y en las que me escribes, y en las que silencias y también en las que solo piensas, el amor está en todas y siempre me llega. Descubrí que tu vida en mi corazón palpita, que tu alegría por mis venas corre, que tu ánimo me envuelve y tu sonrisa me socorre. Descubrí que el amor es el mayor tesoro y cuando tú no estás yo te lloro, y en cada lágrima te encuentro, descubro tu sonrisa que calma mi lamento, y las lágrimas de tristeza se transforman en puro contento.

No hay comentarios: