martes, 25 de marzo de 2025

El gusto por el origen

¿De dónde viene? Por qué queremos saber siempre el principio de todo, cómo comenzaron las cosas, la vida, de dónde salimos nosotros y, sobre todo, a dónde vamos. Por qué no preocuparnos de cómo sentimos y amamos y cómo pasamos este rato llamado vida. ¿Qué tiene el éxito que nos maravilla? ¿Y qué es esa maravilla que, con la edad, se hace papilla? No quiero saber de dónde vengo ni quién soy, quiero sentir amor y expandirlo, quiero que mis amigos se sientan a gusto conmigo. Parece sencillo pero muchas cosas se confabulan para impedirlo. Así que mi gusto por el origen está en saber cómo empezar a conseguirlo. Me embadurno de paciencia, doy sorbos a un zumo de estoicismo, le pongo unas gotas de cinismo, una corteza de humor y unos cubitos de amor. Voy libando del brebaje con los ojos encendidos, voy soñando con ombligos, cosquillas, risas y contigo, claro, siempre contigo. No quiero saber ya nada del origen, me interesa más la continuidad, que la situación se estabilice, amar, crear, jugar, todo sin límite. Sueño despierto, vivo los sueños, los recreo en el papel y los respiro con el viento. Me dejo llevar por las nubes, te alcanzo al vuelo, te doy un beso. ¿Cómo empezó todo esto? Y a quién le importa. Te quito la ropa de un suspiro. No sé cómo empezó, yo sólo quiero estar contigo. Vivir en tu ombligo, amar tu destino, formar parte de tu mecanismo. Palpitar en tu corazón y ser parte de tu emoción.

No hay comentarios: