sábado, 23 de marzo de 2024

No me acostumbro

A que me vendan mentiras como si fueran noticias. A que me digan en el trabajo que, si nos exprimen más cada día, es por nuestro bien. No me acostumbro al capitalismo que lo ha invadido todo, a que nos vendan el aire que respiramos, a que comercien con el agua, a que me cobren varias veces por un médico o por un medicamento. No me acostumbro a los genocidios, a las violaciones, a las manipulaciones constantes, a los que las difunden en los bares, en la calle o en las redes. No, no me acostumbro, a pesar de que sea cotidiano. No me acostumbro a las religiones que permiten los abusos de niños, a los dioses que te obligan a matar, a los pueblos elegidos, no me acostumbro a las razas ni a que existan oprimidos. Ni siquiera me acostumbro al amor, porque el amor es tan maravilloso que me soprende a diario, el amor es revolucionario a la par que necesario. No me acostumbro a ese afán de competir por todo, lo que debemos hacer es cooperar si queremos el mundo cambiar. La lucha sigue, en todo, cada día porque, si te despistas, te arrebatan lo conquistado. No me acostumbro a votar por inercia, a que nos mientan en campaña, a que nos digan que lo que prometieron no se puede cumplir o que ahora no es el momento. No, no me acostumbro.

No hay comentarios: