domingo, 30 de agosto de 2015

¿Por qué deseo lo que deseo?

¿Porque no lo tengo? ¿Porque es lo que quiero? ¿Por qué me gustas tú y me gusta el romero? Ay, son tantas preguntas como deseos. O tal vez una más si me pregunto por qué me cuestiono mis propios deseos. O tal vez es mi deseo preguntar y vuelven a empatar. Desde el umbral de la vida, la duda me acompaña día tras día. Hablo con ella, discuto como con una amiga; le digo que me deje, me dice que se va, pero siempre está a mi lado, tan cerca la siento como el aliento. Tal vez lo que deseo es dudar, tal vez no lo pueda remediar, y aunque sepa que el amor me acabará produciendo dolor, no puedo dejar de amar. Pero en esta vida, la felicidad constante es un cuento de los de antes, y yo no me quiero engañar, quiero sufrir después de amar, pues sin dolor no hay amor, quiero dudar todo el rato y tener pequeños instantes de felicidad. Y como quiero mi sueño cumplido no hago más que soñar lo que vivo. Y en esas estoy, poniendo toda la intensidad en mis instantes de felicidad.

Soy una máquina

Hoy al despertar me he dado cuenta de que, tras una noche de fabricar sueños, inconexos, absurdos y sin dueño, tengo todo el día para tergiversar lo soñado, escribirlo en prosa o rimado, hacer que una pesadilla sea ahora una alegría, que los muertos de la noche se transformen en amor sin reproches. Soy una máquina de sentimientos, los fabrico, les doy cobijo y archivo, desde ahora caminan conmigo y, como un niño, juego con el amor que fabrico. Como máquina que soy, maquino con mi destino, charlo con el pasado con secuencias de recuerdos revisados, atiendo al presente siempre sonriente, así es como he sido programado, y a un ritmo que ni yo mismo domino, construyo un futuro más ilusionante y dulce que seguro. Soy una máquina capaz de amar melodías, lecturas, perros, niños, horas, e incluso también el silencio o la inactividad; soy una máquina de verdad. Soy una gran máquina porque no espero respuesta para amar, ni contacto, ni palabras... soy una máquina que todo se lo puede generar, y con los sueños programados por los hados constructores, fabrico estos versos de máquina para todos mis amores.

domingo, 23 de agosto de 2015

Extraños en el universo

Esparcidos en diferentes puntos, si una línea imaginaria los uniera, un extraño corazón aparecería iluminando con sus rítmicas intermitencias el apacible desorden en el que estamos sumidos. Portadores de una sencillez vital construida de amor puro, los extraños se buscan en el universo durante toda su existencia. Sufren las anomalías cotidianas como ninguno, obligados a percibir el mal en sus carnes, cada extraño va en busca de otro extraño, con esa voluntad inocente e indestructible que les caracteriza, con la fuerza de sus sonrisas sondean el ambiente, intentan cruzar su mirada con la de otro valiente, buscan entre la normalidad la similitud de lo extraño y, a veces ocurre, que entre la vulgaridad monótona, surge una chispa que alerta de que lo extraño está cerca. El corazón palpita con alegría, una melodía respiran los poros, los ojos brillan como dos focos, los pelos serpentean con electricidad, dos extraños se encuentran, el universo siente felicidad.

martes, 18 de agosto de 2015

Palabras gestadas en el alma

Todo lo que sale del alma lleva parte de ella, arrastra la esencia del alma y, las palabras gestadas en el alma, portan la impronta del amor, llevan el consuelo. Son, en principio, palabras vulgares, pero que han adquirido el verdadero sentido, se han fundido en el mejor horno, les ha dado forma la mano invisible del poder auténtico, y un aura esplendorosa anuncia su valor, y un sello de distinción aparece en el significado que percibimos. Las palabras gestadas en el alma son un te quiero materno que nos acompañará siempre, un te quiero eterno y potente, que nunca será ave fénix porque siempre está incandescente. Las palabras gestadas en el alma acompañan de por vida, son un ángel protector, un escudo invisible que nos guarda, son la prueba de la verdad de nuestro amor. Por eso desde el alma te amo, con el alma te acaricio y mis dedos son la extensión que lo hace propicio, mis besos en el alma comienzan su viaje hacia ti, impregnándose de todas las sustancias y sentimientos que te harán feliz. Todas las palabras que de mi alma salen son para ti, gestadas en tu nombre, por tu amor, con la meta de fundirnos y hacer del mundo algo mejor.

miércoles, 12 de agosto de 2015

Más que cerca

Quiero hablarte con el tacto del contacto, acariciarte con frases de cariño, cantarte, como a un niño, el amor que siento desde la boca al ombligo, y más allá, e ida y vuelta, en el calor y en la tormenta, siempre contigo. Quiero estar próximo a ti, que nuestras chispas se besen, que tu electricidad me despierte, sentir tus cosquillas como mías, temblar al unísono, jadear a dos voces, ser el calor de tu roce y, de tu calma, el silencio. Quiero que seas mi sabor, el oído que me cuenta y la voz que escucha, quiero tus manos dibujando en mi piel, quiero que mezcles el color de la alegría, el de la sorpresa y el de la duda; conocer con tus ojos y aprender de tu aventura. Estar a ti aproximado, junto a ti, entre ti, a tu lado, encima o debajo, estar contigo y de ti rebozado. Mi intimidad tienen tus labios y tu alma mi tacto. Quiero estar más cerca que tus párpados, más, incluso, que el pensamiento que ahora te está rondando.

lunes, 3 de agosto de 2015

No sólo

Quiero tus besos, quiero también tus ratos de silencio. Quiero irte conociendo mientras caminamos por diferentes senderos. No sólo tus caricias harán mis delicias, sino también tu estar lejos; saber que puedes ir y venir mientras yo estoy quieto. No sólo tus abrazos me reconfortarán, sino también el que no hagas ruido mientras estoy dormido, el oír tus ruidos cotidianos rondando a mi lado, el tocar tu hueco en las sábanas una vez despertado, el sentirme de tu olor impregnado, el que tu humor me sorprenda a diario creando nuevas sonrisas en mis labios. No sólo con sexo obtendré placer, también observando a tu lado, ante un bonito paisaje, como una lágrima moja tus labios, y no sólo querrás mis besos, pero entonces te daré uno salado, atraparé tu lágrima en mi boca, tus ojos sonreirán y arquearás los labios, mis caricias dulces electrificarán tu piel y mi seductor abrazo provocará el milagro: no sólo será sexo, será conocer, un ser tú, un tú en mí, nuestro amor jugando. Y mientras la vida sigue nuestro tiempo se ha parado.