domingo, 28 de junio de 2015

Besar el látigo

He sido educado para eso, como el noventa por ciento, para besar la mano que me domina, pero soy un rebelde, maleducado, pues leo, pienso y soy autodidacta. Por eso esquivo la mano con simpatía, eludo el látigo con habilidad meditativa y aprendo a pensar en esta vida. La paciencia externa acrecienta la lucha interna. Todo lo programado debe desprogramarse y reprogramarse. El látigo que antes se debía besar ahora debe quemar en la mano. Una sonrisa constante me acompaña como un escudo protector invisible, la sonrisa ejerce de barrera contra el opresor, y el pensamiento libre junto con el amor nos encaminan hacia una transformación feliz. Si no besé el látigo en su momento a santo de qué sucumbir ahora a una mordaza. No sirve de nada y nunca servirá porque mi pensamiento comenzará a gritar. y cuando el pensamiento chilla, la revolución es imparable.

miércoles, 24 de junio de 2015

El sentido de la existencia

Voy detrás de él, le sigo la pista en todos mis actos. Por eso, cada vez que acometo una acción, y para intentar ser justo con el universo, procuro acordarme de añadir ese ingrediente especial, aparentemente insípido, pero que todo lo transforma, que es el amor. Cuando estoy en la cocina haciendo la comida, cuando tengo una conversación intrascendente con un desconocido, cuando me relaciono con un animal, a veces, incluso solo con una mirada; cuando respiro, cuando me acuerdo y siempre que puedo, añado amor. Con amigos de otras ciudades y de otros países, para salvar las distancias, añado amor en cada una de mis palabras, añado amor a la frase y, como colofón, añado una pizca más de amor al comentario o a toda la conversación. Así, cada acto cotidiano, deja de ser anodino y adquiere una magnitud y una trascendencia que nos parecen mágicas. pero añadir amor es solo el comienzo, hay que continuar contribuyendo al bienestar ajeno para que la propia felicidad cobre sentido. El sentido de la existencia podría ser esa armonía natural invisible que todo lo envuelve y casi siempre se nos escapa, esa felicidad gratuita que el ingrediente amor nos regala cada vez que lo usamos y, también, la meditación sobre el sentido forma parte del propio sentido de la existencia. Reconocer el camino, aplicar el amor, contribuir a la felicidad. El sentido de la existencia también eres tú y, por eso, voy a amarte lo mejor que pueda.

miércoles, 17 de junio de 2015

Concurrida soledad

Llena de almas amigas, de cuerpos similares que danzan en otros lugares pero que siento dentro de mí. Concurrida soledad llena de vidas llenas de deseos llenos de amor que guardo en mi corazón. Concurrida soledad que provocas mi amor a través de una fotografía. Cuerpos que intercambian frases y amo para toda la vida. Camino con esta abarrotada soledad que me da vida y compañía. Henchido de amor sonrío al mundo que me inunda de caricias desde diferentes puntos. Susurros de amor se acercan con el viento. Una nube me ronda y deja caer sobre mí todas sus gotas de besos. Vienen de todas partes para habitar esta concurrida soledad en donde vivo. Una lágrima brota en mi ojo conteniendo un rostro amigo, la brisa me abraza con delicado cariño, una fragancia soñada me empapa y en mi boca dos gotas de rocío se transforman en tus labios y, de repente, estoy contigo. Entre jadeos nuestro amor se desborda y nos fundimos. Concurrida soledad, yo no te olvido.

martes, 16 de junio de 2015

Te amo

Porque de mi tablero eres la ficha, y en este juego de la vida tú eres toda mi alegría, mi deseo, mi goce y mi dicha. Querida alma gemela yo te amo, de mis sueños eres protagonista, tu imagen siempre alegra mi vista, y de mis ansiados placeres eres el reclamo. Busco en el aire el roce de tus caricias, si humedezco mis labios encuentro tu beso, y de ti, amor mío, me siento poseso, cada una de tus sonrisas son mis albricias. Te amo porque sin amarte vivir no puedo y si mi corazón de una u otra forma te llama es porque sé seguro que tú también me amas, y ya no puedo pensar en nada más que te quiero. Por eso te amo, te adoro y te venero.

lunes, 15 de junio de 2015

Pienso en ti

Noche y día. Desde que te conozco e incluso cuando no te conocía. Pienso que sin ti no sé qué sería de mi vida. De mis pensamientos eres siempre el principal protagonista. Y cuando no te pienso te imagino y es entonces cuando el día o la noche se vuelven divinos. Aprovecho para ser feliz a tu lado durante el día y, por la noche, de nuestros deseos hacemos derroche. Al día siguiente pienso en lo imaginado y vuelves a estar a mi lado. No sé qué magia o qué ciencia posibilita tu constante presencia, pero cuando por la calle camino, sonrío gozoso, y lo demás me importa un pepino. Vivo en este sueño hermoso donde te pienso o te imagino, y así siempre estás conmigo. Tal vez la mente esté jugando conmigo, pero no me importa, si pienso en ti, no importa porque contigo vivo.

domingo, 14 de junio de 2015

Una lágrima

Doce geishas rodean mi cama. Su danza me turba, su canto me calma, su susurro me arrulla. No me tocan pero noto el roce de su encanto. Fundido onírico en negro. El color de sus mejillas se recrea a mi alrededor, respiro su sonrisa y paladeo sus caricias. Una lágrima empieza a generarse en mi rostro. La lágrima sigue creciendo, parece no querer desprenderse. Es ya enorme. Veo a Mamá reflejada en ella. Su abrazo me ilumina. La lágrima es tan grande que estoy subido en ella, flotando, sobrevuelo por encima de las doce geishas que siguen danzando, que no pare la fiesta. Aquí la desnudez es pura y la vida eterna. No hay forma de explicar tanta belleza, pero para qué explicar si puedo soñar con ella, puedo sentirla y formar parte de ella. Las doce geishas se retiran sin parar de dar armoniosas vueltas y abro los ojos. Sigo encima de la lágrima, desnudo y feliz. Froto mis ojos, la lágrima se desprende y todo el amor de los recuerdos y de los sueños se hace presente. Las sonrisas acuden a mí, las miradas captan en mí todo el amor dormido de la gente. La transformación ha comenzado. Sumidos en la evolución de nuestra especie, el amor es el combustible y el motor, es la esencia y la sustancia, el amor me abrió los ojos a través de una gran lágrima.

lunes, 8 de junio de 2015

El paraíso de tu cuerpo

Ando buscándolo cuando camino por los sueños. Y tú lo sabes, tú sabes que siempre lo encuentro, pues aunque no esté cerca sientes mi amor que desciende desde el firmamento. Cada gota de lluvia es un beso dirigido a ti y también un beso de amor al universo. El paraíso de tu cuerpo me seduce en los sueños, hace vívidos mis deseos. Tengo otra vida más intensa cuando duermo porque tengo al amor que sueño. Me despierto amándote, amanezco siempre contento. El amor es tan magnífico que de una u otra forma me entrega tu cuerpo, superando distancias, diluyendo lamentos, cumpliendo los deseos de un corazón sincero. Por eso ahora cuando vivo sueño y cuando sueño vivo realmente. Cuando cierro los ojos renazco en el mundo de los sueños y, cuando despierto, las sábanas tienen el dibujo de tu cuerpo. Todo ha cambiado y ahora sueño lo cotidiano y vivo el paraíso de tu cuerpo.

domingo, 7 de junio de 2015

Traqueteo

Es el que siento por dentro. Transmitido por el tren en el que viajo, transcurre mi vida como un recorrido, como una distancia. Sumido en mis pensamientos me dedico a observar el paisaje por la ventana. Cielo, árboles, nubes, todo moviéndose y yo quieto. El tren, y a veces también la vida, hace que todo se mueva más rápido, que los detalles apenas se perciban. Me concentro en la ventana, en el paisaje, veo los prados de mi niñez, caminos que se bifurcan y cimbrean, los rodeos que di para llegar a un punto relativamente cercano, las cosas sencillas que me costaron tanto aprender. Mirando por la ventana pero introduciéndome más en mi interior, ya no veo plantas sino sentimientos, los árboles adquieren rostros, los amigos, a veces tan lejanos pero sentidos tan cerca, aparecen surcando el cielo de deseos, de recuerdos, de vivencias y ensoñaciones. Entro en un túnel de conversaciones, se oye de todo, se mezclan ideas, se crean conceptos, hay un te quiero que se sienta a mi lado. Salgo del túnel y veo un pensamiento futuro que hace brillar al te quiero y éste me da la mano, me besa. Miro por la ventana y veo tu rostro sonriendo. Puede que estés lejos, te digo, pero, señalándome el corazón, estás conmigo aquí dentro. Unas nubes de diálogos escancian sus palabras en mi cerebro. Ahora mismo estoy viajando al amor que siento. Mis poros se abren y se electrifican, mi piel vibra de puro contento. Oigo tu voz y no es un sueño. Tu sonrisa me acaricia, tu ternura me desviste, lloro de alegría en tus palabras de vida. El te quiero de mi lado tiene tu cuerpo, el vagón es todo nuestro, el paisaje, melodía, la vida cobra sentido y nos amamos con el sigilo del viento. Miro por la ventana, el aroma de tu piel impregna mis pensamientos, el traqueteo del tren tiene tus movimientos. Miro por la ventana y sonrío al ver a tus besos atravesándola y forrando mi cuerpo durante el traqueteo y, sin pensármelo dos veces, susurro un te quiero que ilumina el vagón entero.

jueves, 4 de junio de 2015

El vuelo

Mi viaje empezó sentado y quieto en una silla. La primera respuesta me la dio el silencio. Con cada idea preconcebida que se perdía por el desagüe de la mente, mi alma se expandía. El yo se diluía. Empezaba a entender. Las duda que antes me asaltaban provocando angustia, ahora me proporcionan alegría. Sigo sentado. Recorro el universo completamente quieto. La conciencia de un pasado lejanísimo se instaura en mí: diferentes personas en un mismo ser, conocimiento renacido. El yo pierde valor y el egoísmo no se entiende. Una luz interior me dice que estás en mí, amor. Aquí, sentados, viajando por el universo, saltando charcos de amor o tal vez versos. Cualquiera diría que no nos movemos, pero estamos en pleno vuelo.