sábado, 22 de abril de 2017

¿Lo de siempre?

Sintiendo que las pequeñas costumbres, esos actos cotidianos que se repiten habitualmente para dar sentido a la palabra monotonía, devoraban los sueños, masticaban las ilusiones hasta hacerlas desaparecer. Pero hoy, hoy ha sido diferente. Mientras cambiaba las llaves de pantalón y preparaba la ropa de trabajo para el día siguiente, he sentido la extraña sensación de que este pequeño acto cotidiano adquiría especial relevancia, pues cierto sentido premonitorio sin explicación evidente y racional, me decía que, muy pronto, todo iba a cambiar, que estos pequeños hábitos iban a pasar a formar parte del recuerdo y, tal vez, un poco más tarde, del olvido. Así que los hice con especial atención, con la cámara lenta de la vida, anotando cada pequeño detalle en mi memoria, fijándome en lo que nunca antes me había fijado, sintiendo el presente densamente, cierta peculiar intensidad hacía crecer mis sentidos y parecía estar, sin saberlo con total seguridad aún, despidiéndome de cierta cotidianidad. Lo de siempre va a dejar de serlo.

domingo, 2 de abril de 2017

Alas invisibles

Percibo su movimiento en ti y, aunque no las veo, son un símbolo para mí. Símbolo de la libertad del amor que nos lleva más allá de la realidad y a través de los sueños a ver lo invisible, a sentirlo, a percibir la presencia del querer, a palpar sentimientos maravillosos, a degustarlos y a olerlos. Oigo el aleteo de tus alas invisibles, mi piel se eriza, un leve cosquilleo siento y el sabor de tus besos se aposenta en mi paladar sin todavía tenerlos. Los presiento. Son besos que me adelanta tu aleteo que no veo solo porque te quiero. Y esta ligera brisa que resbala por mis mejillas son de tus maravillosas alas las caricias. Y es de nuestro amor invisible símbolo las alas que lo hacen visible en estos instantes de inusitado placer, cuando oigo tu voz sin que estés, y, aún en la distancia, tus besos se me estampan en los labios y me elevo para que las nubes me regalen tus abrazos, y tu rostro veo dedicándome sonrisas que son brisas que tus alas invisibles provocan con su movimiento, y con el corazón puedo ver este amor que saboreo, huelo y siento cada vez que percibo tu mágico aleteo.