jueves, 31 de agosto de 2023

Humor y amor

Amigos, si fuera una misa diría hermanos, nos hemos reunido hoy aquí para celebrar lo bonito de la vida: el amor y el humor. Siempre he creído que van entrelazados, por eso me gusta esa frase que dice quédate con quien te haga reír. Y también me encanta hacer el amor plagado de sonrisas, incluso tener que parar, hacer pequeños intermedios sólo para reír. El placer de juntar estas dos cosas maravillosas es increíble. Una sonrisa unida a una caricia, un beso barnizado de cosquillas, el éxtasis de una carcajada, ver sonreír a tu mirada y de mis poros chisporrotea esa felicidad tan ansiada. Cuando te veo reír mi corazón bombea en estéreo porque tu risa es el amanecer de mi amor. La ternura de tus labios arqueados, la belleza de tu rostro alegre y da comienzo una sinfonía de amor que penetra en mis ojos y llega hasta mi corazón. Y sale por mis poros, erizándome los pelos, sin querer me rozas y acrecientas mis anhelos, tropiezo, te ríes, y terminamos con un beso. Amigos, humor y amor, hagamos un mundo nuevo.

miércoles, 30 de agosto de 2023

La amistad es una cosa muy bella

Puede construirse durante años o tal vez en sólo unos pocos días. Y, a lo mejor, incluso a distancia. Pero siempre sabes cuando está ahí porque te hace pensar en la persona amiga, disfrutas cuando tus amigos son felices. En mí brota con una chispa que se enciende y lo llena todo de amor. No sabría decir qué es exactamente el detonante, una palabra, una acción, un gesto, el tiempo transcurrido, el amor sentido. Hay veces que tengo una gran necesidad de compartir con mis amigos todo lo bueno que voy descubriendo en la vida; otras, sin embargo, me conformo con verlos, con sentir su presencia, con leer sus mensajes. Todo es diferente cuando hay amistad, y se nota. La amistad no sirve para apoyarte en alguien y contarle tus penas o pedirle dinero, la amistad va más allá. Lo maravilloso de la amistad es que uno puede verse reflejado en sus amigos a la vez que conoce su personalidad, sus características únicas que, en momentos de máxima felicidad, pueden transformarse en similitudes. El amigo es un espejo, alguien que amamos y contemplamos, alguien que nos enseña a ser y a vivir, con el que compartimos alegría y, a veces, construimos felicidad. Puedes verlo todos los días o una vez al año, y siempre te dará un vuelco el corazón. Por eso los perros son tan buenos amigos, porque leen nuestro ánimo, porque a pesar de ser como somos nos quieren siempre. La amistad es una cosa muy bella porque está llena de amor y el amor es más fuerte que la muerte. Entre dos amigos puede haber risas, carcajadas, conversación, pero también silencio.

La predisposición

Todavía estoy de vacaciones pero ¿qué es estar de vacaciones? Si lo piensas bien sólo es predisposición. Después de pasar unos días maravillosos e intensos en Granada, me lleno de predisposición y me dedico a conocer los alrededores de mi nueva casa y son como unas pequeñas vacaciones dentro de las vacaciones. Paseo por parques descubriendo sitios con encanto, disfrutando de la naturaleza, del canto de los pájaros, de rincones con sombra fresquita y pienso que esta predisposición puedo tenerla todos los días y, así, estar siempre de vacaciones. A partir de ahora lavaré los platos en Roma, fregaré el suelo en Japón, comeré en Ponce, pasearé por Buenos Aires, pasaré la noche en Curitiba. Sólo hace falta predisposición. La necesaria para sentirme en un viaje constante.

martes, 29 de agosto de 2023

La impotencia

No tiene que ver nada con el sexo. La impotencia es querer tener siempre la razón. Verse arrastrado por un entorno que inocula el machismo y te hace creer que forma parte de tu personalidad. Una sociedad que te empuja a un racismo económico, una globalización que te uniforma con odio al distinto. Todas estas cosas y más, pero la impotencia está en no estar capacitado para rebelarse, en verse envuelto en una ecología de mercado, en una protesta del capital encubierta, en una falsa revolución que nunca llega. Todos los días buscamos pequeños cambios, tal vez esa sea la manera, unos cambios que tardaremos en ver sus consecuencias, como el anciano que planta árboles de los que nunca verá su sombra, nuestra revolución triunfará cuando llevemos años muertos. La impotencia es que viviendo tiempos donde la inmediatez gobierna nos ocurra esto. Pero puede que la verdadera revolución sea aceptar nuestro papel, deshacernos de la inmediatez imperante, luchar con amor, cooperar con amor, amar sin esperar nada a cambio, amar para que las generaciones futuras disfruten del cambio generado. Dejarnos llevar, olvidarnos del amor, eso es la impotencia.

lunes, 28 de agosto de 2023

Siete

Es el número de días de la semana y también el número de hijos de mis padres. Así que si yo fuera día sería el domingo, un día para descansar. Tal vez por eso nunca me gustó trabajar, por lo menos no como una obligación. Por eso siempre procuro que mi trabajo me guste, que no parezca un trabajo. Soy una persona festiva y quiero celebrar la vida por lo menos siete veces, como las vidas de los gatos, como si fuera un capítulo de uno de los libros de Milan Kundera, la mayoría tienen siete capítulos. Siete es un número mágico, con suerte, hasta ciertos textos sagrados lo utilizan. Siete son las vidas que quiero pasar a tu lado, vidas llenas de domingos para poder celebrarte como te mereces. Siete besos para saludarte y también siete abrazos. Siete domingos seguidos haciendo el amor, celebrando tu cuerpo, disfrutando tu alma, compartiendo el espíritu festivo, sonriendo en tu piel, nadando en tus nalgas, durmiendo en tu pecho, siete besos te doy en el sueño que me embarga. Y cuando despierte será domingo y para siempre amaré en tu alma celebrando tu existencia a la mía entrelazada.

¿Quién soy?

Muchas veces me hago esta pregunta. A veces creo que soy plural y otras que no soy nada, nadie. Todas las personas que he sido, de alguna forma ¿las sigo siendo o las he perdido? A veces veo fotos antiguas y no me reconozco. Al principio sí, pero cuando comienzo a recordar qué hacía, cómo era, ciertas anécdotas y acontecimientos, y me veo desde fuera, como si fuera otro, como si fuera mi propio dios, mi propio creador, que observa su creación con cierta distancia. Pero esa sensación, ahora mismo, en el presente, no la tengo, tal vez ahora sólo sea dios o alguien que se está construyendo, que se está creando para ser observado en el futuro por su siguiente yo, o lo que es lo mismo, por su dios. Otras veces creo que no soy nada, una mota de polvo que pasea lanzada por el viento y cree andar con dos piernas inventadas en este cuento de la vida donde todo y nada pasa, a la vez, porque tan pronto estás soltando una carcajada como generando un gran charco de lágrimas por nada. Otras veces creo que soy el niño que fui pero arrastrando una vieja carcasa usada y maltrecha de la que no me puedo deshacer, que me envuelve, me aprisiona y no me deja salir, aunque algunas veces lo intento, bailo en la soledad donde me refugio del mundo que me engaña, me siento cada vez más ágil, la carcasa se va desprendiendo, voy soltando costras que me hacen sentir más ligero y, en mi reflejo, veo al niño sonriendo, cantando como un poseso un estribillo que repite: ¿quién soy, quién soy, quién estoy siendo?

domingo, 27 de agosto de 2023

Voy a subirme a un árbol

Construiré una cabaña con todo lo necesario: algunos libros, mis recuerdos contigo, pensamientos e imaginaciones, muchos de ellos sobre ti, las semillas de amor que guardaré en mi corazón, y regaré con sonrisas y lágrimas, porque el amor es así, uno ríe con él y llora por él. Y sí, lo confieso, esos libros que subiré a mi cabaña en el árbol son todos sobre ti. Quiero que las hojas de los árboles me cuenten cosas sobre ti cuando el viento las haga bailar, y me asomaré y respiraré tus noticias. Y quiero mojarme con la lluvia, sentir las gotas como tus caricias, calarme de ti mientras pienso en tus besos, sentirme poseso, soñarme feliz. Quiero sentirme mejor y voy a subirme al árbol del amor, para sentirme resguardado, para oír los cantos de los pájaros cerca y descifrarlos, comprobar que anidas en sus mensajes ocultos, respirar el olor de las plantas y creer que es el tuyo, vivir en un embrujo constante, notar tu sabor en el sabor de los frutos, deslizarme por este hechizo tuyo y entender que tú eres mi único mundo. Voy a subirme a un árbol sin perder ni un segundo.

sábado, 26 de agosto de 2023

El viaje

A pesar de estar inmersos en uno, el viaje es de las cosas más necesarias porque nos enseña la otredad, nos sirve de terapia, es como una pequeña sacudida natural que, al volver al lugar de origen, nos hace ver el mundo de otra manera, la odiada rutina parece que nos vuelve a gustar, queremos volver a ver las caras de siempre y relatarles nuestra experiencia. Aunque muchos sustituyen el relato por fotos, sobre todo en las redes, pero no es lo mismo. Las fotografías para mostrar a los demás deben contener algo artístico porque, cuanto más personales sean, a menos gente tienes que enseñárselas. Cuando uno no puede viajar, a mí me ha pasado estos últimos años, por lo que sea, debe leer más. Las lecturas son viajes espirituales; en poco más de una página sales disparado a otro mundo, otra época, siendo otro. Y en este viaje vital nos vamos preparando para otro viaje: el que casi nadie quiere nombrar. Hoy en día tenemos la convicción de que si no nombramos algo no existe: somos los reyes del auto engaño. Pero la nombremos o no, la muerte camina a nuestro lado en este viaje vital. De nosostros depende hacernos amiga suya o mostrarnos indiferentes. Yo opto por la primera opción. Y como es mi amiga, me gusta pensar en ella. Muchas veces es involuntario, los recuerdos de amigos y familiares desaparecidos vienen a mí sin pedir permiso. Y me hago preguntas, y les hago preguntas, conversamos, practicamos un viaje dialéctico y, no sé por qué, a veces pienso que cuando uno nace ya está muerto. Que la vida solo es una mentalización, que no hay diferencia entre vivir y morir, que la única diferencia está en amar o no amar.

viernes, 25 de agosto de 2023

Mundo distinto

Hoy pensaba en esas frases tan manidas en las que aparece la palabra mundo. En que hay algunas que son ciertas y otras que no. Hay otros mundos pero están en este. Siempre me gustó esta frase y, con el tiempo, me he dado cuenta de que es verdad. Sin embargo, esa otra que dice que cada persona es un mundo no la veo tan clara porque la mayoría de personas habitan el mismo mundo. Tienen las mismas costumbres, socializan igual, responden de la misma manera, llevan años globalizados sin apenas darse cuenta. Pero las personas creativas habitan en mundos distintos. Y no me refiero única y exclusivamente a los artistas. Hay ciertos artistas que son sólo comerciantes, vendedores, muy buenos a veces, pero no son habitantes de mundos distintos. Una vez leí que para ser escritor ni siquiera hace falta escribir. Al principio me parecía que no tenía sentido, pero luego comprendí que hablaba de la actitud. Lo mismo me ocurre a mí cuando hablo de artista. Hay artistas de la vida, no escriben, no pintan, no saben música ni tocan nada, llevan vidas normales, pero pasan por el mundo como verdaderos artistas. La mayoría no lo ve, no se dan cuenta y, posiblemente, es porque están en otro mundo. Cuando estás en un mundo distinto y descubres a alguien que también lo habita te das cuenta enseguida. La mirada les delata, la sonrisa también, su actitud, su manera de estar. Y tu interior sonríe, te dices a ti mismo que no eres tan raro como creías, que en este mundo distinto hay más artistas de la vida que merece la pena conocer.

jueves, 24 de agosto de 2023

Estaba inquieto

No podía dejar de pensar en ti. Cualquier cosa, no sé si por similitud o por qué, me recordaba a ti. Tu imagen era la luz encendida en mi cabeza que todo lo alumbraba. Leía un libro, pasaba una página y ahí estabas tú. Cerraba el libro y te veía sonreír. Miraba por la ventana y, si no estabas, esperaba verte de un momento a otro. No ocurría porque te veía todo el rato. Y comencé a escribir. La inquietud se iba disipando poco a poco, pero yo te seguía viendo con total claridad. Y en el momento que adquirí cierta relajación placentera, comencé a oírte. Solté una carcajada y pensé que no tengo límite, que, tal vez, me esté volviendo loco, pero no había nada en mí que se opusiera a esta nueva situación. Qué más podía pedir. Me puse a pensar en ello. Te veía y te oía, pero también necesitaba el tacto y, antes de que me quisiera dar cuenta, ya había llegado. Tus caricias se asomaban entre las sábanas, cuando me duchaba, en momentos de meditación y en momentos de calma, cuando nada ocurría y ahí estaba tu mano deslizándose sobre mi cara, haciendo aparecer una sonrisa con tu magia inmaculada. Y ahora ya no te sueño porque te vivo como si nada, sí, como si nada de lo demás importara.

El esplendor de lo insignificante

Está por todas partes. Puede que haga falta una lupa, un microscopio o, tal vez, solo unos minutos, unas horas o unos días de espera. Observar en el momento justo, cuando la flor se abre, cuando un rayo de sol lo ilumina, cuando cae la tarde o al amanecer, de noche entre sombras, quién sabe. También se encuentra en todo lo que llamamos rutina: en miradas desapercibidas, en sonrisas amables, en ese tipo de detalles en los que casi nunca prestamos atención porque, a lo mejor, hacemos de forma automática. El esplendor de lo insignificante surge cuando olvidamos el tiempo. Esa gota de sudor que se desliza por nuestro pecho, esquivando pelos, dividiéndose, ahora dos gotitas en plena carrera, una decide rozar el pezón, la otra se aleja, la primera adquiere más velocidad justo al dejar atrás al pezón y se acerca a la otra con unas ganas tremendas por contarle que su aventura ha valido la pena.

miércoles, 23 de agosto de 2023

Disparar con palabras

Sin duda es la mejor forma de disparar, pero también hay que tener cuidado, porque hay disparos con palabras que también pueden herir. Pero yo me refiero a los otros. A esos disparos de palabras donde uno enamora. Sueltas tus palabras llenas de verdad, impulsadas por la sinceridad y el amor, y estos disparos llegan al corazón. Puede que algunas personas se sientan aturdidas al principio, sin duda no están acostumbradas, piensan en simples halagos, pero su interior les dice que hay algo diferente. Cada frase disparada actúa como una pistola de rayos mágica, y las palabras generan unas chiribitas cósmicas que penetran en nuestro corazón y fluyen hasta el cerebro, contactan con nuestra alma provocando unas efervescencias sobrenaturales que nos galvanizan por completo. Cada palabra del disparo nos acaricia, nos arropa, nos arrulla, nuestra piel se tersa, los labios se arquean ligeramente, nuestra sensiblidad se acrecienta como cuando la mano amada roza con sus yemas nuestros pezones, y cada palabra explosiona en nuestro cerebro provocando una dicha placentera sin igual. Nos mojamos los labios con la lengua y captamos el sabor del disparo certero, y sabe como un beso lleno de amor, como una caricia tuya, como esa mirada en la que te zambulles cuando amas la vida y tu compañía.

Soltando lastre

Las mudanzas sirven para ello. Tienes que deshacerte de cosas que, justo el día de cambio de casa, te das cuenta de que las has guardado para nada. Pero ese es el lastre material. Casualmente voy a la biblioteca y un libro de Rafael Argullol, 'El cazador de instantes', define soltar lastre como abandonar lo que hay en ti que no es tuyo. Uno no se da cuenta y la sociedad, el entorno lo van moldeando, acepta opiniones que antes no aceptaba, tiene actitudes que antes no tenía. A veces no se trata más que de cierta evolución natural, pero otras no, otras sólo es lastre que pesa en las espaldas de nuestra alma. Y eso tenemos que soltarlo. El odio es lastre, la envidia, la venganza, van todas en el mismo paquete que debemos deshacernos de él cuanto antes, por nuestro propio bien. Y es aquí donde el amor adquiere protagonismo porque es una de las piezas clave para soltar lastre. Empezando por el amor a uno mismo, porque cuando nos amamos bien a nosotros mismos es cuando amamos bien a los demás, sin posesión, sin dependencias, en definitiva, sin lastres. Soltar lastre sirve también para conocerse uno mismo, te desprendes de lo superfluo, de lo impuesto, de lo que se te pego por el camino. Y lo que queda eres tú.

martes, 22 de agosto de 2023

No hay otra vida sino ésta

Y es mejor así. Puede que haya más cosas, pero no serán vida. ¿Cómo vivir con un cuerpo descompuesto? No sé, no me preocupan las existencias posteriores. Tampoco tengo ninguna prisa, con una sola vida parece obligado tenerla, pero la prisa es la excusa del capitalismo fraudulento. No quiero formar parte de los sin-tiempo sino de los del no-tiempo. Porque al no existir el tiempo tampoco puedes tener prisa. Voy pasando por la vida como si fuera un paseo, así que voy paseando por la vida. Unos te dicen que le busques sentido, otros te dicen que es absurda. Puede que el sentido de la vida sea ese, ser absurda. Llevo más de medio paseo vital realizado y lo único que puedo afirmar es que el amor, a pesar del dolor que produce y que no se puede evitar de ninguna manera, es de las cosas más maravillosas de este paseo. Y que se puede adornar con humor, barnizar con múltiples y pequeñas alegrías diarias, vestir con bonitas palabras, desnudar con apasionadas miradas, disfrutar con sonrisas amistosas y caricias cercanas, y también sentirlo con mensajes lejanos, que se acercan por el aire que respiramos y en volandas nos llevan por esta única vida. Y es mejor así.

domingo, 20 de agosto de 2023

El silencio que habla

A veces el silencio habla. Tienes un tipo de relación con ciertas personas, familiares, amigos, compañeros, quien sea, da igual. Hay una frecuencia en el contacto, en las visitas, en las conversaciones, no tiene que ser exacta, a veces te ves una vez al mes, cada tres meses o cinco días seguidos, pero la relación parece viva. Al principio no te das cuentas, va pasando el tiempo, la vida es así, te dicen, las cosas cambian, pero hay ciertas cosas que no cambian porque sí. Una cortina invisible se despliega, la comunicación se corta, ya no ha visitas, no sales los viernes a tomar algo, se acabó el café del domingo, terminaron las comidas con tu hermano, tu amigo no te llama, no tiene tiempo, está muy liado. Y piensas, qué ha pasado, desde que se separó, desde que murió Papá, desde que le amputaron la pierna, pero te equivocas, no es nada de lo que has pensado. Un día, casi sin querer, ves la luz. Conoces a alguien nuevo, adquiere cierta confianza repentina, me suele pasar mucho, y te comenta algunas intimidades y, como un pequeño chasquido de dedos interior, algo hace clic en tu cabeza, y ese comentario ajeno pasa a ser tuyo, entra en tu vida y se desnuda ante ti, y lo que te contaba otra persona es tu propia vida, es esa relación que has perdido y descubres el porqué, la has perdido por ser tu mismo, porque han descubierto quién eres, que eres distinto a como pensaban ellos, que tienes tu propia vida. Y sólo entonces descubres que el silencio habla. Intentas buscar otras explicaciones porque duele y quieres que el dolor termine. Pero no es la primera vez que el silencio te habla, somos amigos, me ha hablado muchas veces. No importa que ciertas personas se distancien porque siempre estará el silencio. Sus palabras nunca mienten.

De paso

Unos días en Granada. Una amistad humana y otra perruna. De paso por la ciudad, de paso en paso la recorro y la conozco. Aunque me dedico más a conocer personas y sentimientos que monumentos, después pienso que ciertas personas son un monumento en sí mismas, una maravilla de la ciudad que habitan que merece la pena conocer y querer. De paso en la ciudad, de paso por la vida, de paso por el mundo. Disfrutando de la amistad, hallando libros nuevos, descubriendo comidas sabrosas y refrescantes, disfrutando de un cine original en buena compañía. Haciendo cosas simples y de paso llenándolas de alegría, construyendo una amistad con cariño y muchas sonrisas. Llevaba seis años sin salir de mi ciudad, por mi padre y mi perro. Han sido sólo cinco días, pero tan intensos que han parecido cinco meses. De paso por el mundo pero sin despilfarrar segundos. De paso comparto mi amor y de paso cambio de rumbo. De paso y feliz por un viaje tan profundo. De paso, chiribitas de Granada borboteando en mi alma, son el tesoro que me llevo de esta ciudad lorquiana.

sábado, 19 de agosto de 2023

Granada

He visitado Granada en unos pocos días de mis vacaciones. No puedo decir que haya visitado muchos sitios turísticos, pero remomorando tranquilamente el viaje en casa, me he dado cuenta de que ha sido muy intenso, muy sentimental, bastante cultural y, en definitiva, encantador. Nada más llegar visité la tienda de discos Bora Bora donde había quedado con Paco, mi amigo encantador. Mientras lo esperaba me compré dos discos: una reedición de 'Un soplo en el corazón' de Family y el último disco de Guadalupe Plata 'La ruina'. Luego disfruté de los encantos de Paco: su conversación, su amabilidad, su sonrisa, su belleza, tanto interna como externa. Y ese fue el método que seguí el resto de los días: media jornada cultural y de paseo, y la otra media disfrutando de la compañía y el encanto de Paco. A excepeción de los días de cine, que disfruté de las películas en el cine Madrigal junto a Paco. También conocí a Lola, una perra de aguas encantadora que acompaña a Paco a todas partes. Visité dos librerías estupendas, 'El tiempo perdido' y 'El asterisco', muy cercanas la una de la otra, pequeñas pero muy intensas, como casi todo en Granada. En cada librería adquirí dos libros. Dos parecía ser el número mágico de este viaje: dos películas, dos libros en cada librería, dos discos, dos amigos encantadores. Han sido unas vivencias maravillosas que, casualmente, es el material más preciado para construir buenos recuerdos. Parece que la esencia de Lorca está flotando en el aire haciendo que todo lo relativo a Granada sea maravilloso, contribuyendo a mi felicidad. Ahora es el aniversario de su horrible muerte, pero este viaje que tanto he disfrutado demuestra que el espíritu de Lorca está más vivo que nunca, pues invade a los granadinos y a quien visita y disfruta de su ciudad.

viernes, 18 de agosto de 2023

El colibrí

Ante la grata experiencia de 'El caftán azul', vuelvo con mi amigo encantador al cine Madrigal. Esta vez es una película italiana: 'El Colibrí'. Se trata de el apodo que recibe el protagonista de esta historia por su corta estatura cuando era un niño. Sus padres lo llevan a un especialista para hacerle crecer como un niño normal no sin antes de muchas discusiones por ese tema. La película narra la historia de 'El Colibrí' y la relación con su familia y vecinos primordialmente. Sus primeras relaciones amorosas, con sus amigos, con sus hermanos y padres. Algunos personajes están salpicados de características semi maravillosas y muy originales que hacen que la película adquiera por momentos ciertos toques humorísticos, otros muy sentimentales y profundos, algunos teñidos de tristeza vital. La película está llena de saltos en el tiempo, va y vuelve al pasado, adelanta cosas en el futuro, retrocede al presente. Este juego de saltos te hace ir descubriendo la historia poco a poco y de una manera muy original, sin resultar pesado o innecesario, al contrario, está muy conseguido y hecho de una manera acertada. Al igual que con 'El caftán azul', no te vas dando cuenta y se tratan temas muy interesantes de la vida: relación padres e hijos, también entre hermanos, el amor, la eutanasia, ciertas disfuncines personales, posiblemente psicológicas, que, tal vez, pudieran tratarse de propiedades paranormales o de ciertos dones especiales que la mayoría desconocemos por su escasez o rareza, pero que, en ciertos personajes de la película, hacen acopio. También muy recomendable. Todas las ciudades deberían tener un cine Madrigal.

jueves, 17 de agosto de 2023

El caftán azul

Mi amigo encantador me lleva al cine. Vamos a ver una película marroquí titulada 'El caftán azul' en el cine Madrigal de Granada. Un cine independiente donde se pueden ver películas maravillosas, entrar en bicicleta o incluso con el perro, aunque no hay palomitas. 'El caftán azul' narra la vida de un sastre marroquí en su trabajo, con su mujer y su nuevo y apuesto aprendiz. Una película aparentemente lenta, sin estridencias pero muy detallista y metafórica. Digo aparentemente lenta porque hasta que no termina no te apercibes de la cantidad de cosas que han pasado. Narra la historia de una persona normal y simple, de un hombre que duda, que intenta ser comedido en las actuaciones de su vida y que lucha contra sus inclinaciones naturales; y, paralelamente, narra también la forma de enfrentarse de su mujer a la enfermedad. Todos los personajes poseen una empatía natural que les hace entrañables y que se entremezcla con su forma de acatar las normas sociales estrictamente pero sólo hasta donde chocan con el amor a sus seres queridos. Hay una mezcla de tristeza y victoria al final de la película y sales del cine con los sentimientos hinchados de dicha y con cierta alegría vital agridulce. Muy recomendable.

miércoles, 16 de agosto de 2023

Desconexión

Estoy en medio de ella. Ha sido involuntario, producto de un olvido de última hora. Al principio me preocupé, pero ahora lo estoy disfrutando. Estoy en Granada pasando unos días de vacaciones. No puedo conectarme ni hacer fotos, pero hace unas pocas décadas tampoco se podía hacer eso y no pasaba nada. Así que es como una vuelta al pasado en algunos aspectos, pero rodeado de futuro. Mi presente es un pasado futuro, un presente lleno de contrastes. Disfruto de la amistad en vivo, sin pantallas. Las visitas a museos o sitios con encanto las he sustituido por la compañía de un amigo encantador. Charlamos, paseamos, tomamos un helado y nos reímos. Nos alegramos mutuamente de compartir instantes vitales que, sin duda, han mejorado mi vida en todos los aspectos. La desconexión está siendo todo un éxito.

jueves, 10 de agosto de 2023

Contratiempo

Todo parece fluir en armonía y de repente un contratiempo, una losa cósmica cae de golpe en tu cara. Paralizado, ofuscado, no entiendes nada, por qué ahora si todo iba tan bien. El contratiempo lo inunda todo, se hace insalvable. Es de día pero el sol ha muerto. No puedes distraerte porque el contratiempo lo impregna todo. Empiezas a sentir, incluso, que te encuentras mal, el ánimo se ha desinflado, te cuesta respirar, todo lo que haces deja un regustillo a contratiempo. El ambiente también ha adquirido cierto tufo indescriptible, producto, como no, del maldito contratiempo. Buscas soluciones sin ningún orden, te violentas contigo mismo. Comentas la situación a varias personas y vas saltando de una a otra sin ningún consuelo. Te dicen que te llamarán pero el tiempo no corre y te paralizas. Alguien llama y te da un número de teléfono. Llamas, te desahogas, la otra persona asiente y con muy pocas palabras diluye el contratiempo como un experto, sin apenas esfuerzo. El sol se asoma de nuevo, respiras, el ambiente está limpio y tú eres un ser nuevo.

miércoles, 9 de agosto de 2023

El convencimiento

Veo a mucha gente convencida de hechos inusuales, inexplicables que, cada dos pasos, ven una conspiración. Han trasplantado la fe religiosa a todos los ámbitos de la vida: la política, la economía, las opiniones sobre cualquier tema. Pero nunca argumentan ni dan el porqué de sus convencimientos, no les hace falta. Creen en cualquier majadería, porque sí, porque se lo dice su instinto o tal vez el vecino del quinto en el ascensor o en el bar de abajo después de beber varias copas. O porque sale en la tele. No quieren contrastar lo que oyen, sólo quieren creerlo y ya está. Nos hemos olvidado de la memoria, tal vez por eso, a la sociedad actual, a muchas de las personas que la componen, se las denomina como personas con memoria de pez, de un sólo día. Por eso nos engañan constantemente con la mismas mentiras. Por eso y por el convencimiento. Argumentar, contrastar, tener memoria significa pensar y eso cuesta trabajo, esfuerzo, voluntad. Cuando lo sencillo es el auto engaño, el convencimiento sin ton ni son que termina distorsionando la realidad, generando odio y miedo. Por eso abogo siempre por el amor, por la empatía, por la memoria. Siempre el amor.

martes, 8 de agosto de 2023

El relato secreto

Todos tenemos uno y puede que nos lleve toda la vida encontrarlo. Cada persona un relato secreto, una búsqueda de sentido vital, una temporada del absurdo, una vida entre líneas, una danza de vientre entre dos versos, y no sólo eso, un chapuzón, nadando entre versos me veo junto al relato secreto. Algo voy descubriendo. Chapoteo con amor entre los versos, me mojo de ti, me calo de ti. Las gotas que se deslizan por mi cuerpo son tu sonrisa, tus caricias y tus besos. No podía ser de otra manera, eres un ser poético, mis dedos riman con tu piel y mis besos son poemas que con tus labios lees. Recito tu mirada con gemidos y, con el placer que me das, hago todos mis vestidos que están hechos con tu piel, con las yemas de tus dedos, con la humedad de tu lengua, con todos tus te quiero.

lunes, 7 de agosto de 2023

La belleza

Se puede descubrir en todas partes. A veces no se ve a simple vista, tarda en aparecer. Pasa mucho con las personas. Hay personas que pasan desapercibidas hasta que las conoces y, a medida que el trato va avanzado, cada día te parecen más bellas. La amabilidad, la comprensión, la empatía y muchas otras cosas nos hacen ver la belleza interior de las personas, exteriorizan esa belleza que, en un principio, estaba oculta. Es una de las principales leyes no escritas de la belleza. Cuando has tenido un buen día, por lo que sea, tu piel sonríe, lo bello asoma por cada uno de tus poros y parte del resto del mundo lo percibe. La belleza es una energía que pasa de una persona a otra, como un sonrisa que se contagia y que, a lo mejor, puede terminar en carcajada. Hay que descorrer cortinas, atravesar la niebla, esperar unos instantes al que el sol aparezca, se asome por detrás de esa nube inmensa que no nos deja ver la maravilla. Esa belleza escondida forma parte de la arqueología de la vida.

domingo, 6 de agosto de 2023

Dentro de mí

Todo lo que busco está dentro de mí. Ha sido el descubrimiento del día. Lo presentía. Aunque he de decir que, a veces, estaba confundido. El tiempo me ha ayudado a recapacitar, a poner las cosas en su sitio. Siempre miramos al exterior. Cuando se acumulan los problemas queremos cambiar de aires, nos vamos a otra ciudad, pero los problemas permencen. Ahora sé que la escritura es mi máquina de extracción. He de sacar todo lo que se ha acumulado durante este tiempo en que la máquina no ha sido usada. Puede que ciertos temas se hayan secado un poco, que se resquebrajen al salir, pero eso tiene remedio. Con un estilo compactador se puede solucionar. Una vez puesta la máquina en funcionamiento y pasado el rodaje, el motor se habrá acostumbrado a cierta marcha. Dirijo ahora la vista hacia mi interior y todo comienza a brillar. Las ideas apelmazadas se descongestionan, la maquinaria se engrasa con su propio funcionamiento, el estilo se despereza, el papel respira con cada frase y las frases hacen fiestas en los párrafos. Sí, todo lo que busco está dentro de mí.

sábado, 5 de agosto de 2023

La soledad que acompaña

La soledad se aprende. Al principio, cuando eres joven, se huye de ella, produce aburrimiento, sensación de no encajar. Por eso uno va buscando compañías a todas horas. Pero el tiempo enseña que la soledad es necesaria para pensar. Muchos no quieren pensar porque se sufre. La sabiduría hace daño, por eso el tonto siempre es feliz. Pero es una felicidad limitada. La soledad enseña a estar con los demás, enseña a amar a los demás. Los seres queridos que han muerto ya me acompañan en esta soledad. Los amigos en los que pienso a diario también. La mayoría están a muchos kilómetros de distancia, pero hablo con ellos y disfruto de su amistad. Y la soledad se llena de gente sin darme cuenta. La música de fondo me arropa, la lectura me envuelve, el pensamiento es como una fiesta, por eso la soledad me acompaña, porque en mi soledad hay una multitud maravillosa, los recuerdos cobran vida. Familiares, amigos, autores, compositores, todos pululan por mi soledad que es compañía.

viernes, 4 de agosto de 2023

Reproducirse y morir

Hay personas que dicen que nosostros, los humanos, como muchos otros animales, vivimos para reproducirnos y morir. Me parece una reducción muy drástica del porqué de nuestra existencia y, también, por qué no decirlo, no muy cierta. Definir el objetivo de toda una vida solamente en el último instante, la muerte, no parece muy serio. Y que ese instante sea el cincuenta por ciento del objetivo de nuestra existencia, tampoco. La otra mitad es reproducirse. ¿Y todas las personas que no se reproducen tienen una vida sin sentido? No lo creo. ¿Pero qué debemos reproducir? Deberíamos fijarnos en reproducir más amor y menos seres. Traer muchos seres humanos al planeta y multiplicar la indiferencia y el odio parece que no está funcionando. Así que me dedico a reproducir amor. Empezando por mis textos, continuando por la actitud, por las pequeñas relaciones del día a día, y siguiendo por mis amistades. El amor a los amigos da sentido a la vida, pero no sólo eso, cuanto más amor, más calidad de vida. Reproduzcamos amor en cada uno de nuestros actos y, cuando llegue el momento de morir, nuestra energía amorosa seguirá reproduciéndolo. Porque como todos deberíais saber, el amor es más fuerte que la muerte.

jueves, 3 de agosto de 2023

El amor me envuelve

Así es como me siento, envuelto en una nebulosa de amor que me sostiene, que me mueve por el mundo, que hace que pueda soportar la vida que, como cantaba Camarón, a veces duele. Pero el amor hace que todo sea más llevadero. Y cuando hablo de amor es un amor que debe ir anclado en la actitud, en la manera de afrontarlo todo en la vida. Por eso amo los libros, su lectura, los paseos, la bondad de la gente, las ganas de ayudar que tienen cuando vas por la calle y preguntas por algo. Últimamente, cuando hago eso, preguntar, todas las personas que me oyen se prestan voluntarias a ayudarme. Podría parecer empalagoso, pero con el amor, se hace enternecedor. El amor es el envoltorio vital que hace que tu actitud sea la correcta. Disfrutas del momento, del entorno, de tus pensamientos, de tus imaginaciones, incluso de las contrariedades que la vida te plantea. Y este envoltorio amoroso también me hace amar a mis amigos cada día más, disfrutar de sus atenciones, de sus palabras amables que en volandas me llevan, de sus deseos dulces y tiernos. Y envuelto en amor paso por la vida, comiendo un helado, disfrutando del día, viendo felices a las personas que quiero se me desborda el corazón de alegría.

miércoles, 2 de agosto de 2023

Descubrir lo olvidado

Se parece a releer. Por que cuando relees un libro no sólo vuelves a recordar la lectura sino a ti mismo, lo que te provocó ese libro, si te sigue gustando y por qué o, a lo mejor, por qué a dejado de gustarte. Al hacer una mudanza metes los libros en cajas y, luego, en la nueva casa, tienes que reordenarlos y descubres libros que no sabías que tenías, echas en falta otros, que se perdieron por el camino o los has regalado. El descubrimiento con los libros siempre es una alegría. A veces hasta me acuerdo dónde los he comprado, y a quién, y por qué. Otras recuerdo que fueron un regalo o simplemente recuerdo el momento en que los compré. Siempre es grato recuperar estos recuerdos. Uno vive otra vez instantes que creía perdidos, de manera que revivimos. Planeas relecturas, o nuevas lecturas preguntándote por qué aún no habías leído ese libro maravilloso que habita en tus estanterías. A veces nuestro cerebro deshecha recuerdos que una mudanza, un recolocar libros en la nueva casa, les vuelve a dar vida y te alegran el día.