martes, 8 de marzo de 2016

Amor de burla

Disimulada relación. Sociedad de historias reprimidas. Pandereta rota con fronteras de espino, ¿en dónde nos hemos metido? Busco con mis zarpas en la red un amor plano, estático y parlanchín, donde dimensión, movimiento y voz están amordazados en soledades particulares, en trozos de habitación donde se nos ofrece un mundo lleno de ilusión y esperanza, un vacío de colores que hipnotiza. Busco un amor que encuentro encarcelado en una pantalla, que ni siquiera intenta seducirme con palabras, un amor que indaga sobre mí con manidas preguntas, un amor que intercambia trozos de cuerpo, que seduce con sexos sin nombre, donde la multitud solitaria se masturba globalizada, un amor que exige todo y no da nada. Un amor de preámbulo donde el protagonista es el sexo imaginado, donde el miedo al tacto ajeno domina el hiperespacio controlado por programas que analizan el oculto deseo que andamos buscando. Busco entre las teclas un amor que yo mismo me estoy negando. Amor de burla del que siempre huía, disimulada relación que me acabó infectando. Ilusión de pandereta rota, esperanza de frontera de espino, amor de burla que contamina mi destino. Rompo la red, tiro mis zarpas y comienzo a construir el amor con mis propias palabras. Abro los ojos y veo unos versos que a mis labios se agarran. Son las rimas de tus brazos las que sueñan mis abrazos, es un amor sin burla el que siento en mi regazo.

domingo, 6 de marzo de 2016

Hoy sin ir más lejos

Me di cuenta de que olvidé la muerte. Tal vez esté muerto y por eso olvido, o puede que el olvido sea la esencia de estar completamente vivo, inmortal, sempitarnamente vivo. Hoy sin ir más lejos percibo que la muerte es solo un miedo, uno más de los que manejan los cuerpos. Hoy, me quedé quieto y pensé, esto podría ser estar muerto. Aunque la meditación es vida y también quietud. Hoy, sin ir más lejos, pensé que si todos los días son alguna vez hoy, tal vez el tiempo no exista, que solo sea un concepto inventado por el mismo que inventó el estar muerto. Hoy, ayer, ahora mismo, hace un rato, no sé, cómo llamar al momento sin tiempo... sin ir más lejos, di la vuelta al mundo en mi pensamiento.

jueves, 3 de marzo de 2016

La rutina

La rutina de no tenerte no va a conseguir que deje de quererte. Me alimento de paciencia ilimitada, sumergido todo el día en ensoñaciones deliciosas, degusto los caprichos de estas hadas del letargo que atosigan con costumbres repetidas y hacen que pase solitario por la vida adormecido por las fantasías donde tú, mi amor, habitas. La rutina de pensarte es a la vez parecida y diferente; es fría por la soledad real pero cálida por mi sentimiento ardiente; es un pensarte líquido que se solidifica en mi vientre, un tocarte constante sin tenerte, un amarte continuo, un amante exigente, un amor en la distancia que me hace unas veces el más tonto y, otras, el más valiente. Un amor sin fronteras, sin topes, sin límites, un amor más fuerte que la muerte. La rutina de amarte me ilumina, me da aire, me da la vida que respiro cuando te imagino, te pienso y te toco en todo tu arte.